El
despacho está integrado por un grupo de profesionales cualificados que gozan de
una amplia experiencia, lo cual les facilita la adecuada evaluación de
las necesidades personales de cada cliente, así como su correcto
asesoramiento en atención a las circunstancias concretas del caso.
La
confianza y franqueza con el cliente son máximas del despacho,
esenciales para una acertada toma de decisiones que le evite molestias y
gastos innecesarios. La contratación de los servicios se lleva a cabo mediante
la formalización de la correspondiente hoja de encargo profesional en la que detallan
los servicios contratados, los riesgos y los honorarios, así como la
forma de pago. La cuantía de los honorarios es pactada previamente y tarifada
en función de la trascendencia, la dedicación necesaria y dificultad del
asunto, tomando como referencia los criterios del Colegio de Abogados de
Málaga.